Un Segunda B frente a un Primera que fue de Champions, en territorio enemigo pero arropado por una afición que no lo dejara nunca solo.
Ilusión, trabajo y esfuerzo estaban en juego. A pesar de ir perdiendo durante todo el partido los nuestros no tiraron la toalla y como verdaderos guerreros lucharon para conseguir el objetivo, el gol, tras tanta lucha el gol llegó y la grada visitante estalló. Lo necesitaban y lo necesitábamos. Nuestros héroes siguieron luchando y todos vimos mas posible el 3-2 que el 4-1, de la cabeza de Mariano puedo haber llegado ese 3-2 pero no pudo ser.
Los nuestros lucharon y se fueron del césped de Anoeta con la cabeza bien alta y ovacionados con un “Si se puede" por parte de toda la afición.
Perdimos el partido pero todavia quedan 90 minutos de esta guerra y por que no, sigamos soñando. Nuestros guerreros merecen que el jueves 30 estemos junto a ellos animándolos y arropándolos, ellos lo merecen y nosotros también.
Los aficionados tuvimos que aguantar que nos metieran al campo casi hora y media antes al estadio. Además de gritos de a tercera, tuvimos que soportar insultos, escupitajos, lanzamientos de vasos, de bocadillos, en definitiva una vergüenza el trato que recibimos. Pero creo que dimos una lección de animación en Anoeta, gritamos, animamos, nos lo pasamos bien y una vez mas la unión entre jugadores y afición se demostró.
NUNCA SOLO ESTARÁS
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