Para
algunos es solo un deporte, para otros una forma de vida, para otros
una forma de pasar el fin de semana, unos no lo entienden, otros
dicen que es una perdida de tiempo... no tengo muy claro lo que es
para mi pero si se que se me pone el corazón en la boca cada vez que
el equipo rival se acerca con peligro a nuestra portería a falta de 2
minutos para el final...
A
veces me paro a pensar y no encuentro ningún motivo para justificar
la existencia de este vicio a ti, solo encuentro defectos y cosas
negativas. Puede que todo esto se me olvide el día que toca ir a
verte, sacar el carnet de socio de la cartera, entrar y empezar a
subir las escaleras, ver el campo, a veces lleno, otras vacío .. A
partir de ahí pasan 90 minutos en los que solo tiene sentido animar,
nada mas. Estar con toda tu gente, todos diferentes pero siempre sabrás que tienes una cosa con ellos en común, el amor hacia ti. He
de decir que eso solo ocurre en un estadio de fútbol Al salir del
campo, vuelven las dudas, las preguntas... Para que dejarse la voz o
lo que fuere, dinero, tiempo invertido mientras podrías estar
haciendo cualquier otra cosa. ¿Para qué? Si solo es fútbol solo
son 11 tíos corriendo detrás de una pelota y probablemente te den mas
tristezas que alegrías Cuando tu único momento de alegría ahí dentro
haya sido la celebración de algún que otro gol. Muchas preguntas
puedo tener en la cabeza, hasta que me pongo a pensar y recuerdo el
gol de aquella permanencia, el gol de ese ascenso, la clasificación para ir a Europa que sabe dios si lo volveremos a vivir, las
semifinales de aquella copa que nunca nos tuvo mucho cariño,
aquellas goleadas a un equipo enemigo o simplemente partidos
emocionantes que hayamos vivido... Y la verdad, que para que pensar
en lo malo, si eso no nos dejaría tiempo para disfrutar de lo que
realmente queremos, podríamos elegir lo fácil, pero ¿quien hace caso
a la razón frente a la pasión de un corazón latiendo por ti?
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